La propuesta de sistematización de experiencias con la Huerta Escolar “Semillas de Vida” se originó en el año 2015 como un proyecto de investigación escolar de aula, adelantado desde los semilleros institucionales, el cual en el momento se titulaba “RECUPERARTE: HUERTA ESCOLAR SOSTENIBLE” , además era liderado por los estudiantes del grado 11°2: Jorge Eliecer Velásquez Yepes, Julián Atehortua Castaño y Federico Zapata y la docente de ciencias naturales – química Gloria Amparo Ramírez Zuluaga. Alterno a esta actividad en la básica primaria el docente Enérgico Mosquera trabajaba con el grupo ecológico “Brigada planeta” conformado por estudiantes del grado 1° a 5°.
La finalidad inicial del proyecto del semillero institucional consistía en el aprovechamiento de los residuos orgánicos que se generaban en el restaurante escolar, los cuales por su inadecuada disposición en las zonas verdes de la institución estaban provocando un problema de salubridad. Los estudiantes investigadores desde su propuesta pretendían aprovechar estos residuos orgánicos a través del manejo adecuado aplicando técnicas de preparación de compost, producción de humus por lombricultura para obtener abonos orgánicos y biofertilizantes que aportaran al enriquecimiento del suelo de la huerta escolar, para la propagación de especies vegetales, como: el frijol, la lechuga y el maíz en un sistema de cultivos piloto.
La pregunta de investigación que sustento el proyecto de investigación escolar, fue: ¿El suministro de biofertilizantes y compost a base de lixiviados de residuos orgánicos generados en el restaurante escolar de la Inmaculada Concepción mejoraría la productividad de la huerta escolar?
Los resultados alcanzados por los estudiantes investigadores contribuyeron a la integración curricular de la huerta escolar en el área de ciencias naturales desde los niveles de educación, impactando a básica primaria, básica secundaria y media. Además permitió la transformación de espacios y escenarios de aprendizaje institucionales, construyendo inicialmente una estructura, haciendo adecuación del suelo y la implementación de las prácticas agrícolas sustentadas en el ejercicio de ablandar el terreno, airearlo y facilitar la distribución de sustancias nutritivas; así el suelo alcanzo a tener una textura adecuada para la retención de agua, que facilito la descomposición de material orgánico, condición que beneficio la productividad y trazabilidad de la huerta escolar.
La experiencia “RECUPERARTE: HUERTA ESCOLAR SOSTENIBLE” se presentó a diferentes convocatorias, sobresaliendo en el concurso de experiencias significativas estudiantes, Antioquia la más educada en el año 2015 con el estudiante Federico Zapata. También concurso en la feria departamental de ciencia, avanzando hasta la categoría de la feria regional .
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